LA OTRA UCRANIA

   Era otra tarde helada de febrero en Crimea, le gente ansiaba que comenzara a cambiar la temperatura pronto, eran tres meses de gélidos vientos en un panorama monocromático, “los climas helados se sienten realmente espantosos” así decía Halyna, la abuela de Maryia, que esperaba que su nieta terminara las tareas para prepararle un atol de avena con astillas de canela bien caliente acompañado de una hogaza de pan preparado por ella misma, recién horneado, era un olor que llegaba al alma luego de cortarse y salir el vapor del bollo sacado del horno. Halyna esperaba a su esposo que llegara de la tienda donde trabajaba, tomaba un descanso de unos minutos luego de tomar un café humeante, se forraban en sus 3 capas de abrigos y botas y salían a llevar a su nieta a casa de su nuera, coincidiendo con la llegada de su hijo en su casa. Era casi la rutina durante el rudo invierno.

  Andrei era el hijo menor de Halyna, era el único que quedaba en la ciudad, los otros dos se habían ido de Ucrania con sus familias por lo que Halyna hacía lo imposible para facilitarle la vida a Andrei y Nadezhda, su nuera, que inicialmente no la quería con su hijo menor pero poco a poco se fue ganando el cariño y el aprecio de Halyna, más cuando nació Maryia su última nieta que tenía en sus brazos, los demás nietos estaban fuera de Ucrania. Andrei y Nadezhda tenían un laboratorio y una farmacia respectivamente, y fue por eso que no los reclutaron para llevarlos al frente de guerra, prestaban un servicio vital para la comunidad. Aleksei, el padre de Andrei, tenía problemas de salud, pero lograba trabajar en la tienda de alimentos ayudando a su compadre, el dueño del abasto, a organizar, limpiar y atender a los pocos clientes que quedaron luego que comenzó la guerra, mas era una compañía mutua que un trabajo, ambos mayores se echaban cuentos y se reían de sus mejores tiempos en juventud en una Ucrania posterior a la separación de Unión Soviética, donde habían muchas necesidades e incertidumbres pero también había un ambiente distendido fuera de los fuertes controles del gigante ruso.

  Nadezhda visitaba frecuentemente el laboratorio de Andrei para vender los suministros necesarios y ahí fue donde se conocieron en una tarde calurosa de Ucrania, en pleno verano, era la excusa perfecta para irse a tomar una bebida refrescante durante la jornada de la tarde. Andrei recién había abierto el laboratorio y Halyna, buscando apoyar en las operaciones del laboratorio se iba en las tardes para acompañar a su hijo, ella veía como él descuidaba sus labores por irse a la tienda a beber con Nadezhda. Pero cuando llama el corazón no hay argumento válido, Halyna furiosa solo se quedaba callada observando y logrando que el laboratorio continuara trabajando mientras se ausentaba Andrei. Luego el tiempo y los destinos se fueron uniendo para esta pareja profesional con compromisos y responsabilidades compartidas, ligando sus vidas en una sola empresa, el matrimonio. Mas tarde esa empresa comenzó a dar sus frutos trayendo a la vida a Maryia, la alegría de Halyna.

  Aleksei era una persona conservadora, tradicional, muy trabajadora y organizada, vivió la mayoría de su vida con el régimen soviético, y aunque reconocía que eran muy controladores de sus vidas y sus destinos, Aleksei decía que era la manera de darle orden al país para que fuera una nación próspera, contando con la salud y la educación que era lo importante para la familia; él no terminaba de acostumbrarse al régimen distendido de la nueva política de Ucrania, decía que de ahí no salían hombres preparados para combatir en guerra. Pero un golpe de salud le dio un giro inesperado a la vida de Aleksei cuando el corazón lo llevó a la cama por un buen tiempo, haciéndole cambiar el estilo de vida por completo, pero pudiendo beneficiarse de las gestiones del sistema de salud implementado en el nuevo estado de Ucrania, que le suministró todos los cuidados y atenciones, y posteriores medicamentos y terapias necesarias para que normalizara su vida. En ese momento cambió un poco su visión del nuevo estado, del nuevo gobierno.

  Halyna venía de una familia de granjeros, con faenas ganaderas, dar de comer a los animales, ordeñar las vacas, criar gallinas, recoger los huevos en los gallineros, su amor por los animales la llevó a estudiar veterinaria en la ciudad, y en ese andar citadino en la universidad logró conocer a Aleksei, aquel muchacho alegre en su juventud que la llevó a recorrer rincones de Ucrania que ella nunca se imaginó conocer, viniendo de la granja de sus padres y solo pudiendo salir para la ciudad a estudiar. Dos muchachos que desde la universidad decidieron estudiar la manera de unir sus vidas y conocer cómo hacer sus vidas una sola para el amor y la familia. Todavía de mayores mantienen la cara de felicidad al verse en sus ojos uno al otro, y lograr la armonía deseada para sus hijos y nietos, de los que están lejos y los que mantienen cerca.



Autor:
Elio E. Capitillo R.

Fecha: 27 Noviembre 2024

 

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